Talavera de la Reina
Los castellanos profesaban la reforma gregoriana y los mozárabes seguían con las tradiciones visigodas. Para poder atender las necesidades religiosas de los nuevos moradores aparecen nuevas iglesias (lugar donde se impartía justicia) fuera del recinto amurallado.
Una de ellas fue San Salvador de los Caballeros, adosada al exterior de la muralla en la Corredera del Cristo, daba acogida a los pobladores de los Arrabales Mayores.
Al ser dos leyes distintas las que regían la vida en Talavera, son dos alcaldes los que gobiernan, uno para la comunidad mozárabe y otro para los castellanos.
El alcalde mozárabe, al vivir estos dentro de la Villa, impartía justicia en el pórtico de la iglesia de Santa María, mientras que el alcalde castellano lo hacía en el pórtico de San Salvador por ser la iglesia de referencia para los castellanos. Por eso a esta iglesia se le llama San Salvador de los Caballeros, así se les conocía a los castellanos popularmente (caballeros).
La historia de esta parroquia podemos situarla a finales del siglo XI (1086) cuando Alfonso VI conquista Talavera.
Por aquella época la población de la villa estaba formada por judíos, musulmanes y mozárabes. Después de la conquista de Talavera se unieron a ésta, los castellanos procedentes de Castilla, León y Galicia, reinos que pertenecían a Alfonso VI, formaban parte de las tropas de este rey y se asentaron en la ciudad recién conquistada.
Estos nuevos pobladores se sitúan en Talavera alrededor de la Corredera del Cristo formando un nuevo arrabal adosado al exterior de la muralla que se conocerá como Arrabal Nuevo o Mayor.
Los judíos y mozárabes quedan la mayoría dentro de la Villa , algunos diseminados por los Arrabales Viejos, los moriscos ocupan también los Arrabales Viejos y los castellanos, como hemos dicho anteriormente, ocupan los Arrabales Nuevos o Mayores.
Las diferencias entre castellanos (Castilla, León y Galicia) y mozárabes (cristianos que se quedaron en territorio musulmán sin convertirse pero adoptando aspectos de la cultura andalusí, incluida la lengua árabe) eran tanto en lo legislativo como en lo religioso.
En 1487 el regidor talaverano Juan de Arévalo funda una de las dos capillas del interior del templo, la capilla de la Virgen de las Nieves que se encuentra al lado de la sacristía. Más tarde se trasladó a esta capilla el sepulcro del Cardenal D. García de Loaysa que se encontraba en San Ginés (actual Santo Domingo). Esta capilla pasaría después a pertenecer a una familia noble, los Duques de Estrada, enterrados y emparedados en ella.
Por herencia familiar, termina en manos de D. Luis Jiménez de la Llave, historiador local y primer defensor del patrimonio talaverano, vivió en el siglo XIX.
Los sucesivos añadidos que a lo largo del tiempo ha tenido esta iglesia la dotan de una historia y belleza importante.
En 1841 se convierte en una de las iglesias principales de la ciudad, por estar tan céntrica y por tener un gran número de clero, un párroco, un teniente y un beneficiado. Estaban también adscritos a la misma ocho franciscanos, dominicos, trinitario, recoleto, carmelita y dos clérigos de Prima.
Sobre 1845 comienzan a crearse las cofradías. La primera fue la de Nuestra Señora en su Inmaculada Concepción, la siguen la cofradía del Santísimo Sacramento y la de Las Ánimas.
Hacia el año 1970 este templo deja de oficiar actos litúrgicos quedando en un abandono absoluto. Actualmente está desacralizado.
En los años 80 se derriban las casas que estaban adosadas a la iglesia y se descubre el magnífico ábside mudéjar que estaba escondido tras ellas.
Más adelante el ayuntamiento hace una permuta con el arzobispado ofreciéndole dos terrenos, uno en Talavera por la zona del hospital y otro en el Casar de Talavera junto al cementerio de igual valor que la iglesia.
San Salvador de los Caballeros pasa a ser propiedad del ayuntamiento.
En los años 90 se restaura la cubierta debido a su mal estado.
A partir del 2003 comienza la restauración de este edificio en varias etapas. En ella han participado alumnos de escuelas talleres de distintos oficios, cerrajería, carpintería, etc.
La última actuación fue con la escuela taller de arqueología dirigida por la arqueóloga Cristina Lázaro.
Las últimas fases de obra son realizadas por empresas especializadas.
Actualmente está a punto de terminar toda la restauración para ser abierta al público. Se le pretende dar un uso como espacio cultural para el disfrute de los talaveranos y fomentar el casco antiguo de la ciudad.
Hacia 1145 y más tarde en 1205 aparecen varios documentos nombrando a esta parroquia. En uno de ellos aparece como una de las diez iglesias que tenía Talavera en ese momento. Se considera que hasta últimos del siglo XII, no existía el edificio que tenemos actualmente por el estilo mudéjar al que pertenece su magnífico ábside, por lo tanto creemos de la existencia de otro edificio anterior construido por los nuevos pobladores cristianos que llegaron a la villa en 1086.
En 1339 está fechada una lápida sepulcral dedicada a Iván Fernández de la Fuente del Sapo.
A lo largo del tiempo las parroquias de Talavera fueron reducidas en número. En 1854 solo quedan dos parroquias Santa María y Santiago. El Salvador pasa a ser filial de Santa María.
San Salvador de los Caballeros